Fuentes de la Administración fijan la llegada del tren a la estación del Camp de Tarragona entre los días 19 y 21 de este mes
por gemma casalé | gcasale@diaridetarragona.com
Faltan quince días para que el AVE aterrice en el Camp de Tarragona, después de dos años de retraso. La conexión de la línea de Alta Velocidad desde Madrid hasta la estación de La Secuita repercutirá en distintos sectores de la economía tarraconense, pero el tren rápido también se convertirá en el primer e importante cambio social del siglo XXI en el Camp.
Precisamente, por ello, ahora los engranajes de la Administración trabajan a todo ritmo con el objetivo de garantizar que todo «esté bien atado» antes de la inauguración oficial de la línea, programada entre los días 19 y 21 de este mes de diciembre. La fecha coincide con la paralización de la reserva de billetes AVE que ha hecho efectiva Renfe en esta línea, más allá del 15 de diciembre.
A este efecto, la próxima semana se prevé que los alcaldes de Perafort y La Secuita, Joan Martí Pla y Eudald Roca, respectivamente, procedan a la rubricación del acuerdo con Adif. El documento incluirá soluciones en competencias como el suministro de agua potable, el tratamiento de las aguas residuales y el pago de las pertinentes licencias de actividades de los distintos locales comerciales con que contará la estación, sin olvidar otros aspectos indispensables, como son las garantías del servicio de recogida de basura.
El acuerdo, que recoge las reivindicaciones históricas que han sido formuladas a lo largo de los últimos años por ambos alcaldes, se rubricará precisamente ahora, después de que ambos municipios amenazaran con boicotear el acto oficial de inauguración.
Este temor ha sido, según fuentes bien informadas, el que ha propiciado que durante la presente semana técnicos de Adif, capitaneados por su presidente, Antonio González Marín, hayan protagonizado distintas reuniones con los alcaldes.
De esta manera, con los convenios prácticamente rubricados, los altos cargos de Adif garantizarán que la jornada de inauguración, probablemente presidida por José Luís Rodríguez Zapatero y la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, pueda capitalizar únicamente la celebración por la culminación de un nuevo tramo de la línea de Alta Velocidad. Ahora ya con el horizonte fijado en Barcelona-Sants para el próximo año.
Obra concluida
Durante esta semana se ha dado prácticamente por concluida la obra civil de construcción de la estación del Camp. Ahora, sólo falta la materialización de los últimos detalles: la colocación del pertinente mobiliario, la señalización... Pero además de este frente abierto, los técnicos de la Administración también están trabajando para ultimar detalles como la iluminación de la rotonda de acceso a la estación, que hasta hoy carece de luz.
Mientras, la actividad en las vías no cesa. A pesar de que durante el pasado verano se iniciaron los procesos de pruebas de la línea, durante las últimas semanas ha sido mucho más fácil poder visualizar a los vehículos de Alta Velocidad circulando por la doble vía que conecta los noventa kilómetros que separan Lleida de La Secuita.
De momento, Adif y Fomento continúan manteniendo un impermeable secretismo alrededor del acto de inauguración, así como de los detalles referentes al inicio de la explotación comercial de la línea.
¿Y la velocidad?
Precisamente por este motivo también se desconoce la velocidad a la que circularán los vehículos AVE en el nuevo tramo que se empezará a explotar durante el transcurso de los próximos días. Recientemente, Renfe ha conseguido aumentar la velocidad de los trenes que circulan por la vía entre Madrid y Lleida, que únicamente en algunos tramos consigue situarse en los 280 kilómetros por hora. A pesar de que la velocidad media de este trayecto entre Madrid y Lleida continúa siendo de 200 kilómetros hora.
Por otro lado, durante el transcurso de los próximos meses también se espera que en la línea Madrid-Barcelona se realice la entrada en funcionamiento de los dieciséis nuevos trenes que han sido construidos por Siemens, después de un largo proceso, que se ha llevado a cabo a lo largo de los últimos cinco años, aproximadamente.
por gemma casalé | gcasale@diaridetarragona.com
Faltan quince días para que el AVE aterrice en el Camp de Tarragona, después de dos años de retraso. La conexión de la línea de Alta Velocidad desde Madrid hasta la estación de La Secuita repercutirá en distintos sectores de la economía tarraconense, pero el tren rápido también se convertirá en el primer e importante cambio social del siglo XXI en el Camp.
Precisamente, por ello, ahora los engranajes de la Administración trabajan a todo ritmo con el objetivo de garantizar que todo «esté bien atado» antes de la inauguración oficial de la línea, programada entre los días 19 y 21 de este mes de diciembre. La fecha coincide con la paralización de la reserva de billetes AVE que ha hecho efectiva Renfe en esta línea, más allá del 15 de diciembre.
A este efecto, la próxima semana se prevé que los alcaldes de Perafort y La Secuita, Joan Martí Pla y Eudald Roca, respectivamente, procedan a la rubricación del acuerdo con Adif. El documento incluirá soluciones en competencias como el suministro de agua potable, el tratamiento de las aguas residuales y el pago de las pertinentes licencias de actividades de los distintos locales comerciales con que contará la estación, sin olvidar otros aspectos indispensables, como son las garantías del servicio de recogida de basura.
El acuerdo, que recoge las reivindicaciones históricas que han sido formuladas a lo largo de los últimos años por ambos alcaldes, se rubricará precisamente ahora, después de que ambos municipios amenazaran con boicotear el acto oficial de inauguración.
Este temor ha sido, según fuentes bien informadas, el que ha propiciado que durante la presente semana técnicos de Adif, capitaneados por su presidente, Antonio González Marín, hayan protagonizado distintas reuniones con los alcaldes.
De esta manera, con los convenios prácticamente rubricados, los altos cargos de Adif garantizarán que la jornada de inauguración, probablemente presidida por José Luís Rodríguez Zapatero y la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, pueda capitalizar únicamente la celebración por la culminación de un nuevo tramo de la línea de Alta Velocidad. Ahora ya con el horizonte fijado en Barcelona-Sants para el próximo año.
Obra concluida
Durante esta semana se ha dado prácticamente por concluida la obra civil de construcción de la estación del Camp. Ahora, sólo falta la materialización de los últimos detalles: la colocación del pertinente mobiliario, la señalización... Pero además de este frente abierto, los técnicos de la Administración también están trabajando para ultimar detalles como la iluminación de la rotonda de acceso a la estación, que hasta hoy carece de luz.
Mientras, la actividad en las vías no cesa. A pesar de que durante el pasado verano se iniciaron los procesos de pruebas de la línea, durante las últimas semanas ha sido mucho más fácil poder visualizar a los vehículos de Alta Velocidad circulando por la doble vía que conecta los noventa kilómetros que separan Lleida de La Secuita.
De momento, Adif y Fomento continúan manteniendo un impermeable secretismo alrededor del acto de inauguración, así como de los detalles referentes al inicio de la explotación comercial de la línea.
¿Y la velocidad?
Precisamente por este motivo también se desconoce la velocidad a la que circularán los vehículos AVE en el nuevo tramo que se empezará a explotar durante el transcurso de los próximos días. Recientemente, Renfe ha conseguido aumentar la velocidad de los trenes que circulan por la vía entre Madrid y Lleida, que únicamente en algunos tramos consigue situarse en los 280 kilómetros por hora. A pesar de que la velocidad media de este trayecto entre Madrid y Lleida continúa siendo de 200 kilómetros hora.
Por otro lado, durante el transcurso de los próximos meses también se espera que en la línea Madrid-Barcelona se realice la entrada en funcionamiento de los dieciséis nuevos trenes que han sido construidos por Siemens, después de un largo proceso, que se ha llevado a cabo a lo largo de los últimos cinco años, aproximadamente.
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